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Arquitectos: Marc Gerritsen
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El fotógrafo, arquitecto y diseñador Marc Gerritsen quería construir una casa que ofreciera una experiencia de vida auténtica, una conexión con el mundo natural y una retirada de la vida de la ciudad. Después de haber vivido en Taiwán y trabajado en toda Asia durante hace ocho años, fotografiando muchas propiedades de lujo y hoteles de cinco estrellas, Gerritsen comenzó a cansarse de la opulencia y el bullicio de la ciudad. Se encontró anhelando una arquitectura más sencilla y significativa. Fue entonces cuando se topó con una parcela en Koh Samui.
Marc Gerritsen: "lo principal de este lugar es la extensión de los alrededores y la tranquilidad. La vida en taipei es muy agitada, y yo necesitaba un lugar para escapar. Tenía muchas ganas de una zona tranquila y una vista fantástica. Tener una sala de estar de planta abierta, con puertas que se pueden deslizar completamente, que mirara hacia fuera a la piscina y al mar - es algo que había estado pensando durante mucho tiempo. Con esta trama, era capaz de poner las piezas del rompecabezas. La casa era un retorno a los valores básicos de la vida: un buen aire limpio, espacios muy abiertos, tranquila soledad. Con estos valores básicos se puede estar en un espacio ordenado, y la mente puede aquietarse. Esa es también la razón detrás de las materias básicas que he utilizado: hormigón, madera, acero y cristal. No hay adornos. El foco está en el espacio en lugar de los materiales.
Originalmente planeé tres niveles: dos dormitorios en la parte inferior; la piscina, zona de estar y cocina en el nivel medio; y una oficina en la parte superior. Pero he añadido un cuarto de baño en el nivel de la sala de estar, una sala de lavandería y una despensa. Yo quería una cocina simple, sin armarios de arriba o nevera de altura, por lo que la despensa resulta útil para el almacenamiento. He añadido un baño al aire libre independiente, y la sala superior se convirtió en un magnífico dormitorio principal, que necesitaba un baño en suite. La sala de tanques y planta se convirtió en una gran sala abierta con una cama abatible, debajo de la cubierta y añadí una sala de vapor. El espacio por debajo de los dormitorios ahora alberga una oficina y cuarto de servicio. Así terminó siendo de cinco niveles - el resultado de un trabajo en progreso.
Mi trabajo en los últimos años como fotógrafo de arquitectura e interiores me ha enseñado lo que no se debe hacer. En cuanto a todas las propiedades detalladas increíblemente bellas que fotografié en asia. Pensé: "¿es realmente necesario eso para estar cómodo? Si entro a un piso de concreto o si camino sobre un suelo de mármol, va a hacer que mi experiencia de vida sea mucho mejor?" No. Solamente se necesita un piso para caminar. Estoy interesado en un retorno a lo básico, una manera de vivir monástica de lujo.